La delincuencia ha caído tan bajo en algunos países que los ladrones ya ni siquiera se esfuerzan por tener las herramientas adecuadas para su ilegal actividad criminal, ¡pero esto es el colmo!

Por unos instantes los empleados de una funeraria en el municipio de Caldas, Antioquia, en Colombia, se sintieron realmente amenazados por un sujeto que entró y trató de asaltarlos. Pero al final el ratero quedó en ridículo e incluso salió perdiendo, pues dejó su “arma” en la escena del crimen.

Las cámaras de seguridad de esta funeraria captaron el momento en que un ladrón amenazó a un par de empleados. En una bolsa traía algo parecido a una pistola y exigió que le entregaran el dinero.

Pero de pronto una de las víctimas, Antonio Agudelo, se dio cuenta de que este ladrón los estaba “encañonando” con un plátano macho, así que se abalanzó sobre el asaltante y logró quitarle la bolsa.

Como vio que su ingenioso y frutal plan había fallado, el ratero no tuvo más opción que salir corriendo. Su asalto no pasó de ser un intento y se quedó sin su plátano, ¡todo mal!

Antonio se convirtió en el héroe de esta historia, su recompensa fue quedarse con el plátano, y dijo que lo disfrutaría como nunca: “Pienso hacer un buen patacón o hacerme de pronto un buen sancocho o en tajaditas, ya que está bien sabroso”.

En la larga historia de delincuentes tontos, este ladrón sin duda que merece una mención de honor por tener una poderosa arma cargada con mucho potasio. Hasta acá se escuchó su amenaza de: “¡Dame el dinero o te disparo con mi plátano!”